Desde pequeña obsesionada con todo lo que venía de la India, un día un amigo compartió una práctica conmigo y me regaló un libro de Yoga, en ese momento supe que el Yoga sería un pilar en mi vida, aún no sabía cuanto! Jejeje

 

4 años después empecé a formarme, primero con Sivananda Yoga en Vrindavan, porterior en Ashtanga Yoga con David Svenson, y en uno de los viajes a Rishikesh, conocí al que se convertiría en mi primer referente, Surinder Singh, un Hatha Yogui sabio y con un gran sentido del humor!  

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En el 2012 tendría el encuentro con Andrei Ram, mi gran referente, mi maestro y hermano. Siguiendo su linaje, sigo indagando en el autoestudio, y continúo cada año enriqueciéndome con sus formaciones y inmersiones acompañada de la Sangha.

 

Y sigo mi camino compartiendo clases de Yoga, talleres y inmersiones por Europa y formaciones para profesores de Yoga en Barcelona.

 

Siento la práctica ese espacio de liberación de bloqueos, impresiones, buscando el vacío para desde ese estado entrar en comunicación con lo Supremo. 

 

Para conseguir ese vacío, la importancia de entender en cuerpo como herramienta y expresión de nuestras vivencias...y de ahí la importancia de la alineación y el pranayama para generar la corriente vital que nos libera.